¿Qué
pasa cuando un director cree que un actor es el idóneo para un
papel, pero éste lo rechaza? Pues puede que a veces, la película
sea un desastre, pero otras gracias a esa decisión puede que el
resultado sea mejor de lo esperado. Incluso, en ocasiones nos es muy
complicado imaginarlo de otra manera.
John
Travolta rehusó el papel protagonista de “Forrest Gump”.
Ésto fue un golpe de suerte para Tom Hanks, ya que ha sido uno de
sus papeles más conocidos y que le valió un Oscar. Sin duda la
mítica frase de la película: “La vida es como una caja de
bombones nunca sabes lo que te va a tocar...”, le va muy bien a la
gran oportunidad que tuvo Tom Hanks.
Will
Simth rechazó el papel de Neo en “Matrix” para hacer
“Wild Wild West”. Algo incomprensible, sólo con leer el
guión debería haberse dado cuenta que Matrix era una película totalmente
nueva y revolucionaria. Dijo que la veía demasiado ambiciosa y no
creía que el proyecta saliera bien. Sin duda a veces la intuición
puede fallar.
Otras
que también se equivocaron fueron Demi Moore y Meg Ryan
que rechazaron interpretar a la protagonista de “Pretty
Woman”. Julia Roberts no tuvo problema con el papel de
prostituta y fue su salto a la fama y a partir de aquí se convirtió
en la novia de América.
George
Lucas no escogió primero a Harrison Ford para Indiana Jones. Él lo
tuvo claro en la audición, quería que Tom Selleck hiciera el
papel. Pero Selleck ya tenía un contrato para la protagonizar la
serie “Magnum, Investigador privado” y lo rechazó. Así, que
Steven Spielberg convenció a Lucas para que le diera el papel a
Harrison Ford, que ya era famoso por la Guerra de las Galaxias. Al
principio no estaba muy convencido con la idea porque no quería dar
siempre papeles a los mismos actores, pero al final accedió.
Val
Kilmer rechazó el papel protagonista de “Dirty Dancing”.
Patrick Swayze saltó al estrellato por su interpretación del
profesor de baile Johnny Castle. Creo que no hubiera sido lo mismo
con Val Kilmer. En aquella época todas queríamos tener un profesor
de baile como Swayze!
Por
suerte para todos, Tom Cruise no quiso participar en “Eduardo
Manostijeras”. Johnny Deep era el actor indicado para
interpretar esa maravillosa fábula sobre un joven muy especial. Con
Tom Cruise no hubiera sido lo mismo.
Bruce
Willis no aceptó el papel de Sam Wheat en “Ghost”,
junto a su mujer Demi Moore. Después de interpretar grandes
películas de acción no quiso encarnar a un fantasma porque lo
consideraba un poco extraño. Cosa que luego haría en otra película
muy conocida.
Sandra
Bullock dejó escapar el papel de una boxeadora tetrapléjica en
“Milllion Dollar Baby”. Sin duda se equivocó y más si
estaba bajo la dirección de Clint Eastwood. Hilary Swank sí supo
aprovechar la oportunidad y realizó una magnífica interpretación
merecedora del Oscar al mejor actriz.
Sean
Connery es uno de los actores que más grandes papeles ha
rechazado. Es un gran actor y en toda su carrera ha interpretado a
grandes personajes, pero a veces, ha rehusado grandes personajes.
Puede parecer que el papel de Hannibal Lecter era un gran regalo para
el actor que lo encarnara, pero Sean Connery no lo creyó así.
También dejó pasar a Morpheo en “Matrix”. Otro gran
error fue dejar escapar el papel de Gandalf en “El señor de los
anillos” ya que al leer el guión no entendía bien la
historia. Así, se esfumó otro gran éxito.
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