HER

“Her”, de Spike Jonze, es una de las películas más esperadas del año pasado y una de las propuestas más interesantes. Una historia diferente y original con buenas interpretaciones.

La película nos sitúa en un futuro cercano, donde Theodore, un hombre solitario a punto de divorciarse que trabaja en una empresa como escritor de cartas para terceras personas, compra un nuevo sistema operativo basado en un modelo de inteligencia artificial. Éste nuevo sistema está diseñado para satisfacer todas las necesidades del usuario. Pero poco a poco Theodore se sentirá atraído por la voz del sistema operativo (Samantha) y comenzará una extraña relación romántica con ella.

Spike Jonze, el director, empezó su carrera dirigiendo publicidad y vídeos musicales e incluso participó en los programas de televisión “Jackass” de la MTV. Pero decidió dar un giro a su carrera y empezar como director de cine con un toque muy particular. Su primer largometraje es la maravillosa “Cómo ser John Malkovich”, una obra sumamente original y surrealista. Después le siguió “Adaptation (El ladrón de orquídeas)” una propuesta también muy original sobre el estancamiento creativo de un guionista. Su tercer largometraje “Donde viven los monstruos”, es una adaptación de un famoso libro para niños. Ahora vuelve con “Her”, una historia ambientada en un futuro no tan lejano donde los seres humanos olvidan las relaciones personales para volcarse en las máquinas, ordenadores, teléfonos móviles, tablets... Donde los humanos parecen autómatas sin sensibilidad y las máquinas piensan y sienten más que los humanos. Spike Jonze vuelve a explicarnos una historia original y extraña con gran sensibilidad y una estética única.

La fotografía de la película crea un ambiente triste, un poco decadente, donde la gente no se preocupa excesivamente por su físico, porque no se relacionan directamente con las personas. La iluminación suave de toda la película da un toque en tonos pastel que le otorga delicadeza y una armonía visual muy hermosa.

Joaquin Phoenix interpreta a un hombre solitario, triste, una sombra de lo que fue en el pasado cuando estaba con su mujer. Sobre él recae el mayor peso de la película y sale airoso con una de las mejores interpretaciones de su carrera. Para mí es un gran actor y uno de los mejores de su generación. Scarlett Johansson es la voz sensual, divertida, inteligente del sistema operativo del que se enamora nuestro protagonista. Parece imposible que sin salir ni un minuto en pantalla nos ofrezca un papel creíble y precioso. También me ha gustado mucho el pequeño papel de Amy Adams.

En definitiva, es una gran película original y emotiva que da un punto de vista interesante de un futuro donde prima la tecnología y se deja cada vez más de lado las relaciones personales. Sin duda, hay que verla.